El oeste - una prescripción o proscripción dialoga

Resumen

La taxonomía de la humanidad puede ser dictada por numerosas categorías: civilización, raza, etnia, tradición, cultura, etc. Aunque a menudo se percibe sólo como descriptiva y "fijada naturalmente", ninguna de estas categorías es capaz de especificar la identidad de un grupo en particular sin cometer alguna incoherencia conceptual u ofrecer una clasificación razonablemente coherente y sistemática de la especie humana en general. Sin embargo, es imposible decir que son irreales o simplemente ilusorios. Por el contrario, constituyen la realidad social y desempeñan un papel importante en la discriminación de un grupo de personas de y en oposición a los demás. Occidente– igualmente, con su opuesto simétrico, el Resto de la humanidad – es una de esas categorías claramente defectuosas en la racionalidad de su coherencia conceptual. No tiene unidad de consistencia. Más bien, se presenta como una unidad putativa, y contiene contradicciones en sí misma, para que sólo pueda ser unificada en el futuro. Es un imaginario social que funciona principalmente como un mito a escala global, como la raza. Sin embargo, a diferencia de la raza, tiende a presentar una asociación cartográfica. Debido a esta afinidad con la imaginación cartográfica, la dicotomía entre Occidente y el Resto a menudo se invoca como un tropo esquemático de diálogo con el fin de denotar y entender diversos casos de conflicto social y distanciamiento en términos espaciales, pero con el resultado de postular el oeste y el resto como territorios, como delimitaciones geográficas. Este artículo entonces se pregunta ¿cómo puede existir Occidente?